sábado, 10 de noviembre de 2007

Analisis de: "Duelo a Garrotazos" o "La riña" (1820-1823)





Dimensiones: 123 x 266 cm.


Lugar: Museo del Prado (Madrid, España) Sala del primer piso.


Se encontraba en una de las salas principales de la Quinta del Sordo. La sala superior era donde estaba colocada la obra, compartiendo la pared con las Parcas.


Tema: Dos hombres que están sumergidos en arenas movedizas, enterrados hasta las rodillas, y en vez de tratar de salvarse, están golpeando al otro con garrotes. La cara del hombre a la izquierda está sangrando. Ese hombre está casi muerto pero todavía está luchando. El otro está inclemente. Goya no enterró a ambos personajes, sino que fue el restaurador de toda la serie, Martínez Cubells. No pueden escapar así de los golpes de su adversario.


Al fondo se observa un paisaje donde también se aprecia la mano del restaurador.


Significado: Es posible que es una comparación a España y la barbaridad de la guerra civil, aunque se puede extender a la violencia innata del ser humano que tanto criticaba la Ilustración. No pueden escapar así de los golpes de su adversario; acaso una metáfora de la imposible evasión del mal de la destrucción. Es una de las más coloristas de la serie, lo que puede ser interpretado como un rayo de esperanza y de vida tras el final de la violencia.


Pertenece a: las Pinturas Negras y la serie de Los desastres de la guerra, unos grabados en que se plasman todas las miserias y brutalidades de los hombres en guerra, y la represión tras ella.


Técnica pictórica: Óleo originalmente sobre pared, traspasado a lienzo.


Dibujo: Están muy bien delimitados los personajes, al ser sus ropas oscuras contrastan con el fondo tan claro. Predomina la verticalidad, nos transmite fuerza. Una de las pinturas murales hecha para él mismo. Es una pintura que anuncia el expresionismo. Se expresa con gran libertad en ella.


Color: Utiliza colores fríos. Es una pintura bastante colorista, a pesar de que pertenece a las Pinturas Negras. Especialmente el fondo. Predominan colores marrones y grises.


Luz: Hay un solo foco de luz, procede del sol que intenta salir detrás de las montañas iluminando a los dos personajes, sugiriendo un atardecer. Al verlo lo primero que llama la atención son las dos personas, después uno mira el paisaje. El fondo es bastante claro contrastando con los dos hombres que llevan ropas de colores oscuros.


Profundidad: La perspectiva es aérea, no hay ningún punto de fuga. Solo vemos una parte del terreno sobre el que se encuentran, porque deben estar en un sitio más elevado.


Figuras: Tienen un movimiento serpentino o giro de forma helicoidal. Los dos personajes tienen una posición poco natural. Es bastante forzada y necesaria para golpearse entre ellos. Muestran bastante esfuerzo corporal.

Composición: La colocación y el orden de las figuras son simétricas puesto que el cuadro se puede dividir en dos partes: los dos personajes golpeándose (parte más importante, a la izquierda) o el paisaje de la montaña.

Curiosidades: Este duelo a garrotazos era una costumbre cruel, Goya la utiliza a modo de símbolo, que se practicaba en algunos lugares de España. Eran peleas cuerpo a cuerpo en las que se esgrimían porras, palos y garrotas. Tenían carácter ritual y se practicaba entre los jóvenes, normalmente, de pueblos próximos. La pelea no era superficial, sino que se aporreaban hasta que moría uno de los contendientes. Por la época, se prohibieron estas luchas fratricidas, pero, no obstante, se seguían practicando.

2 comentarios:

el duende dijo...

El filosofo frances Michel SERRES alude a este lienzo en una entrevista del periodico "le monde" hoy dia hablando de la cumbre de Copenhague.
Dice que la cumbre se jugo uno en contra de otro : los defensores de la economia omnipotente en contra de la ciencia que atestigua lo que està pasando.
Dice Michel Serres que desde luego tendremos que convidar la tierra a esas cumbres, o sea el pueblo.

Si no, estamos condenados a hundirnos como los dos enemigos que pinto Goya en el ocaso. La tierra elle misma nos hundira si nos olvidamos de ella.
Ya es el ocaso tal como lo pinto Goya.

Hemos aqui la prueba de la universalidad de la pintura de este gran maestro...
Desde Francia le saluda "el duende".Felices Pascuas de Navidad.

Unknown dijo...

En la pintura original, las piernas están ente la hierba, fue la restauración posterior, al haber sido la obra arrancada de la pared y estropeada, cuando se restaura poniendo arena bajo sus cuerpos. Representa la lucha fraticida entre españoles. La ignorancia que conlleva a la violencia, por posicionamientos enfrentados de ideologías, los moderados contra los liberales.